Lima Compost se encarga de enseñar a tod@s sobre el compostaje, lo fácil que es y cómo hacerlo en casa sin generar malos olores y atraer plagas. Se empezó enseñando a compostar a cada persona y hogar interesado en Lima, con talleres y las ollas composteras y poco a poco se ha llegado a más de mil personas.
Este año, uno de los fundadores, Gonzalo junto con Sebastian continuaron a hacer lo mismo en Piura, que se vio muy afectado por el fenómeno del niño. Desde allá, trabajan para enverdecer las zonas afectadas por los huaycos, han construido un invernadero y hacen talleres de compostaje.
Ambos salen en este video hecho por Sadhana, en el cual Gonzalo explica que nosotros no somos los que hacemos el compost, sino que creamos las condiciones para que los microorganismos descompongan los residuos orgánicos.
Hay muchas maneras: bajo tierra, sobre tierra, utilizando cajones de parihuela o cualquier envase poroso. Lo importante es que el compost siempre respire, pues los microorganismos necesitan del oxigeno para vivir.
Lo que utiliza Gonzalo es una olla compostera de Lima Compost, que esta hecha de arcilla sin curar para que se mantenga porosa.
Lo importante es que el compost siempre respire, pues los microorganismos necesitan del oxigeno para vivir.
Para hacer compost necesitamos de 4 elementos principales:
1. Residuos frescos: que son (casi) todos los que salen de la cocina como restos de verduras, frutas, restos de café o bolsitas de té. Es recomendable no poner productos de origen animal como carnes, huesos o lácteos con la excepción de la cáscara de huevo.
2. Residuos secos: todo lo que viene de una planta que ya está deshidratado como el pasto seco, hojas secas, cartón y papel. Gonzalo señala que el puño de algarrobo es muy bueno y se encuentra en gran cantidad en Piura. Acá en Lima también nos puede ayudar el aserrín.
3. Oxígeno: es muy importante. Hay que remover el co1mpost para que se oxigene bien y los microroganismos puedan descomponer la materia orgánica.
4. Agua: Necesita que hayan buenas condiciones de humedad para que se desarrollen los microorganismos. Siempre debe estar húmedo el compost.
Cómo compostar en el hogar:
Lo primero que se hace es una base de secos de 2 a 4 cm para que absorba el exceso de humedad que pueda haber. Encima de esto se agrega los frescos, lo ideal es que estos estén triturados o cortados para que se descompongan más rápido.
Es recomendable que al mezclar haya la misma proporción de materiales frescos y secos. Gonzalo después de hacer la prueba de humedad nota que falta más residuos secos así que le agrega más puño de algarrobo a la mezcla.
Lo ideal es que los residuos estén triturados o cortados para que se descompongan más rápido.
Para saber que las condiciones de humedad son buenas, toma un puñado de la mezcla y presiona con fuerza. Al presionar deberían caer algunas gotas de agua. Si la mezcla se siente seca en la mano es porque le falta agua. Si cae un chorro de agua es porque hay un exceso de humedad.
Una vez que tenemos las condiciones adecuadas: buenas condiciones de humedad y una mezcla equilibrada entre frescos y secos, ponemos una última capa protectora de secos: por ejemplo, papel periódico sin trozar. En este caso, Gonzalo vuelve a usar puño de algarrobo y luego una tapa más gruesa de pasto seco.
Esta tapa retiene la humedad y evita que salgan olores que puedan atraer insectos no deseados.
Al final, colocamos la tapa de la olla o un cartón grueso.
Se debe mover mínimo una vez a la semana y en alrededor de 2 meses ya tenemos compost, listo para las plantas.
Para ver el manual compostero, haz clic aquí.
Luego, en el mismo video, Sebastian nos cuenta cómo las semillas de las frutas y verduras que se agregaron al compost, pueden volver a brotar. Así se cumple el ciclo de la vida generando nuevo alimento y grandes oportunidades.